miércoles, 28 de mayo de 2008

Basta ya

Si tenemos en cuenta que a las 4 de la mañana seguia tomando vino y riendo como hiena fantaseando con la idea de que estaba en el cocktail mas exclusivo del mundo, tiene sentido que me haya despertado en el piso envuelto con una frazada como un canelón.

No hay comentarios: