miércoles, 13 de agosto de 2008

nada me causa rechazo.
no creo tener nada en contra de lo que nosotros denominamos villeros, gente ordinaria, popular.
tengo mis fuertes reservas con respecto a ciertos detalles.
por ejemplo, sí, puedo confirmar que detesto a la gente que no quiere pensar.
porque la verdad es que cerebro, en mayor o menor escala, tenemos todos. y aunque todos nos hagamos un momento para quemar unas neuronas, aún y por suerte, no conocí a una persona que no le funcionaran. puedo confirmarme que entonces el hecho es, que desafortunadamente para ellos mismos, se niegan a usarlas.
y esto es una pena, porque todos estamos preparados para afrontar aunque poco sea, un mínimo cambio al rumbo del mundo.
a veces leer un buen libro te eleva. tanto en la imaginación como a nivel intelecutual.
te preapara para crear. para asociar. desde que lees las primeras líneas sabés si es para vos o no.
hay libros que se leen en uno o dos días. y pasa.
a mí me pasó tres veces, debo confesar. y se que me va a pasar muchas veces.
pero mientras eso sucede, estoy inmersa en miles de páginas y soy uno o todos sus personajes, sus voces y sus caras y sus acciones y su vida soy todo yo.
a veces aunque las cosas no sean absolutamente claras, que sean borrosas o difusas, son parte de dejar soltarse, como un paso previo a dejarse ser.
los libros son una de las miles de cosas que te preparan para pensar. y desafortunadamente, mucha gente no cree estar preparada para eso. y muchas veces, en muchas situaciones los tenemos que padecer.
estoy indignada.